Dos exagentes de la policía londinense, imputados en un caso de imágenes pedófilas
La otrora respetada policía de Londres, cuya creciente crisis de confianza se vio recientemente agravada por las violaciones en serie cometidas durante años por uno de sus miembros, vio el jueves a dos de sus exagentes imputados en un caso de imágenes pedófilas.
Scotland Yard anunció el jueves que un inspector jefe de 49 años, Richard Watkinson, fue hallado muerto el 12 de enero cuando se disponían a imputarlo de varios delitos, incluido "voyeurismo", tomar "fotografías indecentes" de un niño y "conspiración" para "distribuir o exhibir imágenes indecentes de menores".
Su muerte se considera inexplicada pero no sospechosa, precisó.
En el marco del mismo caso, se inculpó a dos exagentes ahora sexagenarios, que dejaron la policía hace unos 10 años, de delitos cometidos posteriormente entre 2018 y 2021.
Jack Addis fue acusado de "conspiración para distribuir o exhibir imágenes indecentes de niños" y Jeremy Laxton del mismo cargo y de posesión de "imágenes pornográficas extremas".
Este nuevo escándalo se suma al de David Carrick, un policía expulsado del cuerpo el martes tras admitir ante la justicia haber cometido 24 violaciones y múltiples agresiones sexuales contra 12 mujeres durante casi dos décadas.
En reacción, la ministra británica del Interior, Suella Braverman, instó a las fuerzas del orden a depurar sus filas y erradicar a los "agentes corruptos".
La policía londinense se enfrenta a una profunda crisis de confianza tras una sucesión de casos que se suman a la muerte en marzo de 2021 de una londinense de 33 años, Sarah Everard, violada y asesinada por un agente.
Este, Wayne Couzens, fue condenado a cadena perpetua. Y se acusó a los responsables policiales de haber ignorado las señales de advertencia sobre su comportamiento.
Una investigación independiente debe indagar sobre los casos de Couzens y Carrick.
P.Ortega--LGdM