La UE propone prohibir en el bloque productos del trabajo forzado (comunicado)
La Comisión Europea lanzó este miércoles una propuesta para prohibir en el mercado de la Unión Europea los productos manufacturados como resultado del trabajo forzado, con independencia de su lugar de procedencia o manufactura.
"Nuestra prohibición se aplicará a productos nacionales, exportaciones e importaciones por igual", apuntó en un comunicado el vicepresidente ejecutivo de la Comisión, Valdis Dombrovskis.
El plan de la Comisión permitirá a las autoridades aduaneras nacionales iniciar investigaciones sobre productos "sobre los que existan sospechas fundadas de que se han fabricado con trabajo forzoso", según el comunicado.
Los investigadores estarán facultados para realizar controles e inspecciones, incluso en países fuera de la UE.
"Esta propuesta marcará una diferencia real en la lucha contra la esclavitud moderna, que afecta a millones de personas en todo el mundo", añadió Dombrovskis.
El objetivo, agregó, es "eliminar del mercado de la UE todos los productos fabricados con trabajo forzado, independientemente de dónde se hayan fabricado".
Un estudio reciente realizado por las agencias de la ONU para el Trabajo y la Migración junto con la Fundación Walk Free encontró que a fines del año pasado, 28 millones de personas en todo el mundo realizaban trabajos forzados.
La propuesta requerirá la ratificación de los estados miembros de la UE y el Parlamento Europeo antes de entrar en vigor dos años después.
El proyecto lanzado por la Comisión Europa se distancia de una iniciativa semejante propuesta por Estados Unidos y que se concentra exclusivamente en productos manufacturados en la región china de Xinjiang.
China es acusada de utilizar de forma forzada la mano de obra de minorías musulmanas.
La región de Xinjiang es uno de los mayores productores mundiales de algodón, y un abastecedor fundamental de materiales para la fabricación de paneles solares.
La UE saludó a inicios de la publicación de un informe de la ONU sobre la situación de los uigures en la región de Xinjiang, gesto que provocó una airada reacción del gobierno chino.
P.Ortega--LGdM