El Sinn Fein se encamina a una victoria histórica en Irlanda del Norte
Los primeros resultados del largo conteo de votos que se reanudó este sábado para la elección del Parlamento regional autónomo de Irlanda del Norte dan hasta ahora una clara ventaja al partido republicano Sinn Fein, una victoria histórica que podría dar pie a un terremoto político.
Mientras que se esperan los resultados en Irlanda del Norte, el veredicto de las urnas para las elecciones locales en el resto del país ya cayó: el Partido Conservador de Boris Johnson sufrió un duro revés, afectado por el escándalo de las fiestas durante los confinamientos y la subida de los precios, lo que debilita su posición al frente del gobierno.
En Irlanda del Norte, donde se renuevan los 90 miembros electos de la Asamblea local de Stormont, el recuento de los votos, interrumpido durante la noche, se reanudó el sábado.
Hasta el momento dan una clara ventaja al Sinn Fein, --ex brazo político del IRA, que aboga por la reunificación de Irlanda-- con 18 de los 47 escaños declarados, frente a 12 para su rival, el partido unionista DUP, favorable a la corona británica. Aspira a tener 28 para reclamar el puesto de primer ministro local.
- "Verdadero cambio" -
El Sinn Fein es ya el que obtuvo más votos de primera preferencia (29% frente a 21,3% para el DUP), lo que le convierte en el primer partido de Irlanda del Norte.
Si se confirma esta ventaja en términos de escaños, sería la primera vez que el partido republicano encabeza el Parlamento regional en los cien años desde la partición de la isla, en 1921.
La vicepresidenta del Sinn Fein, Michelle O'Neill, se refirió a unas "elecciones de un verdadero cambio". La victoria la impulsaría al puesto de jefa del gobierno local.
Sin embargo, el acuerdo de paz del Viernes Santo, que en 1998 puso fin a tres décadas de sangriento conflicto entre republicanos católicos y unionistas protestantes, establece un reparto del poder entre ambos campos. Y si el Sinn Fein y los unionistas del DUP no se ponen de acuerdo, la formación de gobierno quedaría bloqueada.
- "Plan de acción" -
En el resto del país, el Partido Conservador de Boris Johnson perdió cientos de escaños y una docena de concejos frente al Partido Laborista, primera fuerza de la oposición, que logró el control del altamente simbólico distrito de Westminster, sede del poder político británico, por primera vez desde su creación en 1964. También se alzó con otros bastiones conservadores londinenses como Wandsworth.
El centrista Partido Liberal-Demócrata y el ecologista Partido Verde también se llevaron varios de los puestos perdidos por los conservadores.
En Escocia, el independentista Partido Nacional Escocés (SNP), de centroizquierda, se fortaleció, y los laboristas arrebataron el segundo puesto a los conservadores. Los laboristas se mantuvieron en primer lugar en Gales.
Johnson, de 57 años, obtuvo una amplia victoria en diciembre de 2019 con la promesa de romper años de estancamiento político y poner en marcha el Brexit.
Pero su poder se ha debilitado por las fiestas ilegales organizadas en Downing Street durante los confinamientos de 2020 y 2021 y por un brote inflacionario que golpea a los bolsillos de los votantes.
El primer ministro reconoció que su partido tuvo una "noche dura" en algunas circunscripciones, pero reivindicó avances en otras.
Johnson podría ver reavivada la rebelión interna en su Partido Conservador, donde algunos diputados contemplaban hace meses la posibilidad de una moción de censura.
Para convencer, Johnson tendrá que presentar "un verdadero plan de acción" el martes, durante el tradicional discurso del trono en el que el gobierno desvela sus prioridades ante el Parlamento, estimó Simon Usherwood, politólogo de Open University.
El objetivo es mostrar que "este gobierno tiene el control de la situación con respecto al coste de la vida o de Ucrania", añadió.
M.Pacheco--LGdM